Zsankó Családi Gazdaság

La finca ubicada en Zalaszentlászló, que fue el antiguo hogar de los padres de la esposa de Norbert, es hoy el centro de esta empresa artesanal. Para Norbert no había duda de que quería continuar aquí lo que sus abuelos comenzaron: la elaboración de alimentos auténticos, de alta calidad y sin aditivos. La casa fue construida con las manos de su suegro y ahora alberga un moderno taller.
Cuando era niño, Norbert participaba a menudo en las tradicionales matanzas de cerdo, y aunque entonces no lo sabía, esas experiencias serían la base de lo que hoy es la granja familiar “Sabores de la Abuela”.

En la granja actualmente viven entre 60 y 70 cerdos de tres razas diferentes: mangalica autóctono, duroc americano y razas cruzadas, lo que les permite adaptarse a las necesidades de todos los clientes, ya sea que prefieran productos más grasos o más magros. Los cerdos viven al aire libre y la mayor parte de su alimento se cultiva en tierras propias, lo que garantiza un control total sobre lo que comen los animales y, en última instancia, lo que llega al plato de los clientes.
En la oferta encontrarás jamón ahumado, salchichas, chicharrones, manteca casera, y de forma estacional, Norbert también elabora morcilla, salchichas para asar, chuletas, paté para untar y gelatina de carne, todo de manera tradicional, al estilo de Zala, sin aditivos ni colorantes artificiales. 
Norbert está muy orgulloso de que las recetas de sus productos no hayan cambiado en generaciones: solo se necesitan sal, pimienta, ajo y pimentón, nada más. El ahumado se realiza con madera de haya y, ocasionalmente, con madera de árboles frutales, utilizando el método de ahumado en frío, siguiendo las técnicas de los ancianos.

“Sabores de la Abuela” no es solo un nombre de marca, es un estilo de vida y una filosofía que promueve el regreso a los sabores auténticos. El objetivo de Norbert es ofrecer a sus clientes lo mismo que daría con gusto a su propia familia. Por ello, las compras se realizan directamente en la granja, junto al taller, donde se pueden conocer los productos y sus historias en persona.
Para Norbert, el mayor reconocimiento es “cuando una abuela mayor, con lágrimas en los ojos, dice: ‘Esto sabe exactamente como antes.’ No podría pedir nada más.”

¿Tienes curiosidad por saber cómo funciona un pequeño taller rural? ¿Te gustaría visitar la finca y conocer de cerca cómo se elaboran los productos de Zsankó? La buena noticia es que Norbert estará encantado de mostrarte todo, desde los cerdos hasta el ahumadero. Además, puedes solicitar una mesa rural, donde podrás degustar los exquisitos sabores de la abuela en el patio de la casa de Zalaszentlászló. Solo necesitas coordinar previamente por teléfono.

Jamón ahumado

El jamón ahumado de Norbert Zsankó no tiene prisa, y quizás eso sea lo que le da su carácter especial. La carne de cerdo de alta calidad reposa entre 4 y 6 semanas en una salmuera que contiene únicamente sal, ajo y pimienta. Luego se somete a un lento ahumado en frío, utilizando exclusivamente madera de haya. Así, el jamón adquiere ese sabor ahumado profundo pero elegante que se percibe en cada bocado. La carne no es esponjosa ni acuosa, sino firme, fácil de cortar y naturalmente salada. Totalmente libre de aditivos y potenciadores de sabor, fiel a las tradiciones.

Salchicha casera de Zala 

Esta salchicha no es solo “casera”, es realmente como la que hacían nuestras abuelas. La receta no ha cambiado en generaciones: carne fresca de alta calidad, la cantidad justa de grasa, sazonada con sal, pimienta, ajo y pimentón de calidad. Nada más.
La carne sazonada se embute en tripas naturales y se ahuma lentamente con madera de haya en frío durante varios días. Esto le da su color rojo intenso, su sabor lleno pero no excesivamente salado, y su textura ligeramente firme. Ya sea para el desayuno, la cena, una tabla de embutidos o como acompañamiento de una copa de vino, esta salchicha no pasa desapercibida.

Puntos de venta de la Granja Familiar Zsankó “Sabores de la Abuela”:
●    8788 Zalaszentlászló, calle Rákóczi Ferenc 13.